Porque
siempre estaba ahí, por los pasillos por clase... diciendo” ¡Hola, chicos!” con
ese tono que todos tenemos en nuestra mente; porque siempre conseguía hacernos
aprender las cosas con sus “tonterías” y poses raras (¡ja,ja, ja!) como la
Pasiva. ¿Quién no se acuerda de donde pasa el Complemento Directo y “demases”?
Es y era ÚNICA, nadie como ella para hablar y pasar muy buenos ratos. Siempre
veía las cosas de una manera muy optimista, siempre el vaso medio lleno,
siempre quedaba alguna solución. Como ella ninguna y si no, que hagan una
encuesta.
No sería capaz de olvidarla. Marcó la vida de muchas personas e hizo grandes
cosas por todos nosotros. Siempre en el corazón, Conchi.
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